Las finanzas corporativas cuentan con diferentes perspectivas que están pensadas para lograr el éxito de una compañía. Estas tienen diferentes enfoques que han de tratarse cuidadosamente para que una empresa pueda alcanzar una liquidez económica. En este sentido, se deben idear estrategias que tengan que ver exclusivamente con los ingresos y con la productividad.
¿Cuáles son las perspectivas financieras?
Las perspectivas financieras solo son uno de los cuatro enfoques fundamentales que tiene un mercado para mantenerse estable. Aquí hay que tener en cuenta todo lo relacionado con los ingresos y la producción. Este tema se profundiza en la Especialización en Finanzas Corporativas de la EIA.
El objetivo principal es el de demostrar a todos los accionistas que hagan parte de la sociedad que la empresa tiene un buen rendimiento, crecimiento y puede alcanzar una sostenibilidad. De este modo, sabrán que es totalmente seguro seguir invirtiendo, ya que el negocio tiene la capacidad de recuperar cualquier gasto y, posteriormente, convertirlo en ganancias.
Es ahora cuando entra en juego algo llamado estrategia organizacional. Consiste básicamente en plantear una meta: generar utilidades que puedan servirle de mucho a la liquidez de la compañía.
Las perspectivas de los mercados emergentes
En líneas generales, son cuatro las perspectivas que tiene una sociedad para plantear estrategias y tener la capacidad de incrementar la productividad, el reconocimiento y las ventas. Un mercado que se está constituyendo o formándose ha de concentrarse en estos aspectos:
- Perspectiva financiera. Se trata de todo lo que involucre a las ganancias de la compañía. Se prioriza la producción total de la empresa. Diseñar estrategias para mejorar los ingresos es la responsabilidad de quienes estén a cargo de esta faceta.
- Enfoque en el cliente. La sociedad entra a pensar directamente en cosas como mantener al cliente satisfecho, qué es lo que está pidiendo la sociedad, diseñar estrategias para que un producto de la empresa sea muy demandado, etc. Todos los indicadores que estén dirigidos directamente al cliente (compras, quejas, valoraciones positivas, envíos devueltos o cancelados…) son importantes para conocer qué se puede mejorar en el entorno laboral.
- Procesos internos. Es fundamental que en los mercados emergentes se adquiera una capacidad para optimizar procesos. La organización que se dé dentro de la empresa va dirigida a satisfacer las necesidades de los clientes y también las exigencias de los inversionistas.
- Aprendizaje y crecimiento. En este ámbito se trata de aprender tanto de experiencias como de suposiciones. Todo lo que se hace allí es pensar cómo se puede mejorar un proceso. Para conseguir este objetivo, se idean o planean estrategias que serán aplicadas a largo plazo.
Todas las perspectivas financieras de una empresa
Para entender mejor cómo funcionan las finanzas, se debe hacer alusión directa a las estrategias que se plantean dentro de las perspectivas financieras.
Obtención de ingresos
La planeación de obtención de ingresos se realiza con diferentes enfoques. Puede tratarse de la adquisición de capital por medio de los accionistas. También es posible la venta de la producción de la empresa. El cliente es de suma importancia aquí, ya que llegar a una clientela mayor y fidelizada significa aumentar los ingresos de forma considerable.
Estos objetivos son primordiales porque son los que finalmente deciden si la empresa puede sostenerse o no. También son los indicativos que usan los accionistas para poder decidir en qué momento retirarse o bien invertir más capital para que la compañía genere más ingresos.
Precio de las acciones
La obtención de ingresos por medio de acciones es algo muy común en los mercados emergentes. Es cierto que las acciones en compañías pequeñas se convierten en una ayuda muy buena que estabiliza la economía. Sin embargo, este enfoque se va perdiendo conforme la sociedad alcanza un punto en el que no necesita financiación proveniente de terceros.
Una compañía productora, al no tener cómo invertir en materia prima, debe recurrir a estos medios, los cuales equivaldrían a los préstamos. Así se va alcanzando una estabilidad económica poco a poco y las acciones que venden pueden volverse fondos que también beneficien a quienes inviertan en ellos.
Flujo de caja
Los informes financieros que constatan todos los ingresos y egresos de la compañía proporcionan un orden. Estos ayudan a conocer cuál es la capacidad adquisitiva que tiene un negocio.
Lo que debe hacer cualquier experto en finanzas es tener los datos e historial de las transacciones hechas por la empresa ordenados y disponibles en todo momento. La información contable, los balances generales, los resultados, los gastos y los ingresos son los que conforman este aspecto.
Utilidad neta
Para un mercado es preciso conocer cuál es la utilidad neta con la que se cuenta en un momento determinado. Esto quiere decir que al capital total se le restarán las deudas, lo que le corresponde a cada accionista y otros gastos. En el instante que la utilidad neta sea superior a las deudas de la empresa, se alcanza un punto de estabilidad económica.
Esta información puede ser muy importante para poder planificar estrategias de mejoría o de continuidad.
Valor agregado
Cada proceso que se lleve a cabo dentro de una compañía tiene tanto gastos como ganancias. El valor agregado es la diferencia entre el costo de producción y los ingresos por la venta de dicho producto.
En los mercados lo que se busca siempre es tener una manera de que, sin reducir la calidad, se pueda obtener un mayor valor agregado a todos los productos que se comercialicen. Esto se irá logrando mediante la aplicación directa de métodos de optimización de procesos, la consecución de materias primas más baratas, etc.
Lo que hace parte del valor agregado es:
- Remuneración o pago a los empleados.
- Impuestos y subvenciones a la producción.
- El consumo del capital fijo.
- Excedente de explotación bruto.
Retorno de inversiones
Todo lo que se hace en el sector de las finanzas tiene que ver con inversiones para retornar ganancias. Existen varios tipos de inversiones que una empresa realiza para que las ganancias siempre superen los gastos:
- Compra de materia prima para producción.
- Venta de acciones.
- Marketing y publicidad de los productos ofrecidos por la compañía.
En el mundo de los negocios, aunque no se habla explícitamente de esto, siempre se realiza. Para que una empresa pueda brindar un producto necesita adquirir los elementos necesarios. Posteriormente, el artículo resultante sale al mercado teniendo en cuenta sus costos y una ganancia que se llamará retorno de la inversión.
Margen de contribución
El margen de contribución puede ser algo muy parecido al retorno de las inversiones. Sin embargo, este solo tiene en cuenta las ganancias de la empresa sin considerar los costos de producción. En un momento determinado, se hacen estudios para comprobar qué tanto está creciendo la compañía en el mercado.
Esta perspectiva sirve para adoptar decisiones que requieran de atención inmediata. Si el margen de contribución resulta positivo, se idean maneras de aumentarlo. Pero, si por el contrario, es negativo, se busca una solución inmediata, ya que esto quiere decir que hay pérdidas.
Margen operativo
El margen operativo no estudia directamente las ganancias o las pérdidas de la empresa, sino que se fija en las ventas de la compañía. Esto significa que, cuando el margen es positivo, la cantidad de ventas supera a la producción y, en consecuencia, los ingresos pueden ser positivos también. Si las ventas son bajas, es porque se está perdiendo la producción.
Cualquiera de los dos márgenes es el encargado de indicar a los expertos que algo anda bien o mal dentro de los procesos de la compañía. Ya luego se decidirá cómo subsanar este error o mejorar las ganancias aprovechando el buen momento.
Razones para estudiar en la EIA
Realizar una especialización en finanzas puede ser una elección muy buena para todo profesional. Esta es una oportunidad para mejorar los conocimientos y llegar a mejores puestos, en los cuales se toman las decisiones trascendentes de la compañía.
Estas son algunas importantes razones para estudiar en la EIA:
- Enseñanza especializada. Todo lo que se aprenderá en estos cursos está encaminado a resolver las problemáticas que se puedan presentar en el día a día. Siempre se busca poner por encima el desarrollo profesional y personal del aspirante.
- Calidad en vez de cantidad. Esta es una institución avalada y acreditada en alta calidad. Es mucho mejor graduar pocos profesionales muy conocedores que muchos medianamente formados. El país no requiere de cantidad sino de técnicos aptos y bien formados.
- Exclusividad. No cualquier persona está capacitada para estudiar una especialización de la mano de los profesionales de la EIA. Se trata de una educación de máximo nivel que busca formar los mejores expertos que puedan llevar a cualquier empresa al éxito.
Conclusión
Los profesionales en finanzas corporativas siempre tienen la labor de realizar un papel excepcional dentro de su campo laboral. Para poder lograr este cometido, se deben tener en cuenta y conocer cómo se planean y manejan las perspectivas dentro de un mercado emergente y que este pueda llegar a ser sostenible.
Este tema se profundiza en la Especialización en Finanzas Corporativas de la EIA.